Capítulo 45

"Mis dos acosadores distintos"

No dejé de fregar las baldosas del baño hasta que desaparecieron las marcas de barro de los zapatos. Los zapatos eran de tamaño adulto, como medí con mis dedos, y pertenecían a un hombre. ¿Quién podría ser? Fue una serie de eventos aleatorios lo que me hizo preguntarm...

Inicia sesión y continúa leyendo