Capítulo ciento veintiuno

Matteo ignoraba completamente lo que Alessio le estaba diciendo. Algo sobre cómo había llamado a sus abogados y tenían una reunión programada para mañana. Su atención estaba en otro lado: su novia, su esposa. Genevieve estaba bailando con su padre, quien no había exigido nada más que un firme apretó...

Inicia sesión y continúa leyendo