Capítulo setenta y cuatro

Genevieve se sentó en la parte trasera del SUV, esperando ansiosamente su destino. Se inclinó hacia adelante en su asiento, tratando de vislumbrar el club misterioso del que Matteo siempre hablaba. Captó la sonrisa cómplice de Leo en el espejo retrovisor y se sonrojó antes de recostarse. Aunque la m...

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