No eres una presa

Lola

El vapor se enroscaba a su alrededor como humo de una pira, elevándose espeso e interminable, envolviéndolos en algo que se sentía menos como vapor y más como las cenizas de todo lo que habían perdido. Las palmas de Enzo se apoyaban contra los azulejos, encerrándola.

Su boca presionaba su...

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