Soy un lobo

Terminamos de cenar y bajamos a la playa y fue mientras estábamos sentados en la arena, con las piernas aún entrelazadas, el sol caliente, el océano fresco—cuando la pregunta que ha estado zumbando bajo mi piel finalmente sale.

—Damien… ¿qué me pasó realmente anoche?

Él se queda quieto—sus brazos ...

Inicia sesión y continúa leyendo