Capítulo 205

Tatiana:

Sus manos eran fuego.

Se hundió dentro de mí antes de salir, sus embestidas sin seguir un patrón. Pero podía sentirlo palpitar con cada segundo que pasaba. Su verga estaba dura, palpitaba por mí y su lobo aullaba. No podía sentir el vacío en el que se adentraba, incluso si quisiera. Me ap...

Inicia sesión y continúa leyendo