Capítulo 130

Intenté apartarme, solo para que él me agarrara los codos y me jalara cerca. Me miró hacia abajo, el agua fría cayendo sobre ambos.

—¿Qué demonios viste en Nikki? —dije amargamente—. Es una total perra, sin clase ni compasión, y aun así estuviste con ella durante dos años.

Frunció el ceño, soltand...

Inicia sesión y continúa leyendo