Capítulo 151

—Estás jugando sucio, nena— gruñó él, pero no me detuvo mientras le bajaba los boxers.

—Oh, puedo jugar más sucio si quieres... No soy un ángel, Ojos Azules. Déjame ir contigo y cumpliré todas tus fantasías... Te daré una noche para recordar... desde un baile erótico hasta mucho más. Puedes doblarm...

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