Capítulo 38

La sala del trono estaba tenue, iluminada solo por la luz intermitente de las antorchas que bordeaban las paredes. Las sombras se retorcían y danzaban sobre la fría piedra, reflejando la brutalidad que había echado raíces en lo que una vez fue el dominio de Shane. Yo, Roy, ahora me encontraba donde ...

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