Capítulo 34 Una persona de corazón blando

La atmósfera en la habitación se volvió fría y silenciosa de repente.

Hazel y Lawrence estaban de pie y sentados respectivamente, atrapados en un enfrentamiento silencioso.

Lawrence, sentado en su silla de ruedas, entrecerró los ojos y frunció el ceño, exudando un aura de desagrado.

—¿Tú? No vale...

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