Capítulo 267

En la plataforma, Kieran empujó a Alexander, totalmente sorprendido. —¡Tío, es realmente Elizabeth!

Los ojos de Alexander estaban fijos en Elizabeth.

Sí, era ella.

En el momento en que salió del coche, lo supo.

¿Quién hubiera pensado que Elizabeth podría correr?

El coche de Victor se detuvo jun...

Inicia sesión y continúa leyendo