Capítulo treinta y cinco

Abriendo los ojos, Jayme no estaba segura de qué hora era, pero la habitación estaba oscura. No había luces encendidas ni reloj. Mirando alrededor, vio a Scott dormido en la silla. Mirando hacia abajo, vio a Bella, que estaba despierta y moviéndose, Jayme la levantó y lentamente se movió para bajars...

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