Capítulo 8

PROFESOR REED

Jess sonríe ante mi pregunta.

—Sí —dice rápidamente, ya tratando de escabullirse de debajo de mí para poder darse la vuelta. Dios, es perfecta. Le doy otro beso antes de deslizarme lentamente fuera de ella con un gemido doloroso. Odio dejar su apretado y húmedo coño, pero me muero po...

Inicia sesión y continúa leyendo