Capítulo ciento catorce

Capítulo Ciento Catorce

La mañana se sentía inusualmente tranquila. Un día de semana, pero sin el ajetreo del trabajo esperándola.

Tia había estado despierta antes del amanecer, doblando las camisas de Andy, juntando sus calcetines en pares, revisando su pequeña bolsa de viaje una y otra vez.

Él ...

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