Capítulo ciento veintinueve

Capítulo Ciento Veintinueve

—Bueno —dijo Nita, alisando su vestido con lentos movimientos de los dedos, como si se estuviera preparando para una actuación. Levantó su bolso de diseñador de la mesa de mármol, lo colocó cuidadosamente en su regazo y lo abrió sin prisa.

De su interior, sacó un sobre ...

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