Capítulo ciento cincuenta y uno

Capítulo Ciento Cincuenta y Uno

Sábado por la mañana.

—Dijiste a las 4 pm, ¿verdad? Llegaré a tiempo para recogerte— dijo Tia, agachándose un poco para ajustar el cuello de la camisa de Andy, alisándolo como si fuera lo más importante del mundo.

Andy apenas se mantenía quieto. Sus ojos recorrían ...

Inicia sesión y continúa leyendo