Capítulo doscientos ocho

Capítulo Doscientos Ocho

—Prepárate, quiero ir a algún lugar con Andy—dijo Adam, besando su cuello desde atrás.

Tia se dio la vuelta, sorprendida, sosteniendo la toalla que había estado usando para secarse las manos.

—¿A algún lugar? ¿Dónde?

Él sonrió un poco, sus ojos suaves pero burlones.

—Lo...

Inicia sesión y continúa leyendo