Capítulo 114: La boda

Luca.

Nunca pensé que me temblarían las manos por algo que no fuera una pistola.

Pero ahí estaba. De pie, con el traje ajustado, el corazón latiendo como si estuviera en medio de una emboscada, y los ojos fijos en el pasillo que llevaba al altar.

El patio de la mansión estaba transformado: luce...

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