EB Capítulo 64 Parte 2

—Pero a veces —dije, bajando la voz— los momentos más exquisitos surgen precisamente de esas complicaciones. Mis dedos desabotonaron el primer botón de su camisa, luego el siguiente. La tela blanca y prístina se abrió, revelando la piel suave de su pecho, la sombra tenue de los músculos debajo. Mi t...

Inicia sesión y continúa leyendo