Capítulo 150 Nuestros corazones están conectados

Sarah le dio a Elizabeth una palmada tranquilizadora en el hombro.

—Oye, ¿qué pasa con el tono formal? Entiendo lo que estás tratando de decir. No te preocupes. No le contaré a nadie sobre el pasado de los niños, especialmente a David. Su seguridad es la máxima prioridad. Puedes contar conmigo. Mis...

Inicia sesión y continúa leyendo