Capítulo 74: Paige

Mis oídos zumban.

El mundo se siente apagado, cada sonido amortiguado y lejano, como si estuviera bajo el agua. Mis ojos están fijos en la sangre que se acumula a unos pocos pies de mí, extendiéndose lentamente por el linóleo.

Ella está muerta.

Esa mujer. Murió.

Por mi culpa.

No puedo respirar....

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