Capítulo 26

Han pasado quince días. Quince días desde la última vez que vi a mis padres, a mi familia. Todavía estoy en este hospital, acostada como un cadáver en la cama. Mi mano sigue enyesada y algunas vendas de mi cuerpo han sido retiradas. Mi cuerpo ha comenzado a sanar, pero mi alma sigue en dolor.

Algun...

Inicia sesión y continúa leyendo