Capítulo 39

Me despierto con el estridente sonido de la alarma de mi celular, me estiro perezosamente en la cama, terminé durmiendo mejor de lo que esperaba, miro hacia un lado y Filippo no está aquí, ni siquiera vi a qué hora regresó, simplemente me desmayé anoche.

La puerta del baño se abre y el olor de Fili...

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