Capítulo 10 El José pervertido

A Victoria le encantaba tirar dinero a alguien. Pero Violet, la que recibía el dinero, no lo disfrutaba en absoluto, ya que era su propio dinero.

—¡Espera y verás! ¡Hoy mismo conseguiré que alguien te dé una paliza! —Violet exclamó furiosa, sacando su teléfono. Hizo una llamada y, en poco tiempo, s...

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