14. Estar ahí

Ella se quedó conmigo hasta la mañana. Me desperté un par de veces, pero volví a dormirme al sentirla a mi lado. Me estaba gustando su olor, nunca me había gustado la vainilla antes, pero cuando la olía en el hueco de su cuello, me sumía en el mejor sueño que había tenido en años.

—Despierta, Gary,...

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