Capítulo 29

—¿Por qué demonios estás cerrando la puerta? —pregunto en pánico.

—Shh —dice Harper, poniendo un dedo en sus labios mientras se acerca—. Sé una chica fuerte; no dejes salir el llanto todavía —ríe.

Alguien se acerca por detrás, y no lo esperaba, ya que estoy enfocada en los ojos de Harper. Su mirada...

Inicia sesión y continúa leyendo