CAPÍTULO 121

Lucas está en el balcón, con los brazos apoyados en la barandilla, los ojos mirando las luces de la ciudad con una mirada perdida.

Hace frío, pero apenas siente la brisa fresca rozando su rostro, y no hace nada para calmar la tormenta que lleva dentro. Todo ha estado sucediendo tan rápido—Lucien, s...

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