CAPÍTULO 137

—Vas a comportarte hasta que termine mi trabajo y nos vayamos a casa —dice Xerxes con firmeza, ajustando el cuello de Ciel como si estuviera preparando a un niño para su primer día de escuela. Ciel quiere ser mimado, no hay nada de malo en eso—. Nada de peleas. Nada de contestar. Nada de juegos.

Ci...

Inicia sesión y continúa leyendo