Capítulo 54

Al salir del café, Hana se detuvo y envió un mensaje a alguien, supongo que a Wictor, mientras yo seguía besando su cuello y disfrutando de estar cerca de ella. A decir verdad, me había vuelto adicto a la suavidad de la piel de su cuello. También disfrutaba poder mostrar mis sentimientos por ella a...

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