Sexo Gay

Mientras yacía en la cama, con el corazón acelerado por la anticipación, Justin me miró con una sonrisa traviesa y me atrajo suavemente hacia él.

—Siéntate en mi cara, cariño —dijo suavemente, con los ojos ardiendo de deseo.

Dudé por un momento, sin saber qué hacer, pero la mirada en los ojos de J...

Inicia sesión y continúa leyendo