Capítulo 51

Era un día tranquilo, y había pasado la mayor parte en la habitación, perdida en mis pensamientos. De repente, alguien llamó a la puerta. Me levanté del escritorio y caminé hacia la puerta. Al acercarme, me detuve para mirarme en el espejo, pasándome una mano por el cabello. Me arreglé la camisa y r...

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