Capítulo 42

Capítulo 42

Reyna caminó hacia la barra, moviendo las caderas al ritmo de la música. El barman, un hombre alto y musculoso con una sonrisa encantadora, levantó la vista cuando ella se acercó.

—¡Hola, guapa! ¿Qué te sirvo esta noche?

Reyna le lanzó una sonrisa coqueta, sus ojos brillando con picar...

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