Deja que te ayude

Lanre entrecerró los ojos. Vio que Theresa Mo lo estaba mirando con enojo. Desvió la mirada. No había venido a verla para pelear, sino para pedirle que reconsiderara su decisión.

—Lanre, me estás poniendo de los nervios. ¿A qué has venido? Suéltalo de una vez y deja de hacerme preguntas pretenciosa...

Inicia sesión y continúa leyendo