CAPÍTULO VEINTICUATRO

La oscuridad en sus ojos solo sirvió para alterarme, mi cuerpo reaccionando de maneras que no comprendía. Estaba hormigueando por todo el cuerpo, sus ojos penetrando profundamente en mi ser.

Mientras Xavier, en su forma completamente alienígena, caminaba más adentro en la habitación, retrocedí un p...

Inicia sesión y continúa leyendo