Capítulo veintitrés

Una noche al lado de Levi comienza con un silencio lleno de tensión. Miro al techo, cuidando de no moverme demasiado hacia el centro y rozar accidentalmente su piel ardiente, pero eso me hace parecer rígida. Sé que él se da cuenta.

Suspira y se mueve para presionarse contra mí, silenciando las preg...

Inicia sesión y continúa leyendo