Capítulo 138

El dolor era insoportable; sentía la hoja cortando mi palma.

Incluso el más mínimo movimiento me dejaba sin palabras.

Justo entonces, la puerta principal de la villa se abrió de golpe y varias personas entraron apresuradamente.

No podía concentrarme en quiénes eran; el dolor lo consumía todo.

—¿...

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