CAPÍTULO 42: El maestro de la Virgen, parte 5

… los golpes de mi Amo se vuelven más fuertes cada vez.

¿Debería hablar?

En algún nivel, siento que esto debería doler, y lo hace, pero abrazo el dolor mientras se transmuta en placer y un creciente deseo interno. Con cada golpe, jadeo, estremeciéndome mientras el látigo quema, pero no tengo ganas d...

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