Capítulo 164 Capítulo 164: Ir a la casa de los Cappelletti

Kendrick asiente y toma mi mano, para posteriormente, disfrutar de la vista. Su ceño fruncido ya no está, como tampoco encuentro el enojo porque las cosas no salgan como él esperaba.

Yo tampoco me siento molesta por ello, después de todo, hay cosas que no se pueden controlar y debemos aprender a vi...

Inicia sesión y continúa leyendo