Capítulo 28. Alineando chakras

Gael

Dejo a Abril en el fulano trabajo que no me agrada para nada. Sonrío ante el recuerdo de la madrugada. Su piel me devolvió la sonrisa que me había quitado el recuerdo de la muerte de mi hermano. Lorenzo tiene toda la razón. Debo empezar a sanar. Pero hablar con mi madre no es una opción, ni si...

Inicia sesión y continúa leyendo