Capítulo 28

Esa noche, Kenneth me llamó. Era la primera vez que me contactaba en meses.

—¿Dónde estás?

—En Nueva York.

—¿Dentro de la escuela?

—No.

Guardó silencio por unos segundos y luego susurró:

—Voy a pasar por algo y, casualmente, pasaré por tu escuela. Si te viene bien...

Contuve la respiración e ...

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