Capítulo 29

Después de que el bebé se durmió, finalmente me quedé dormida un rato. En ese breve momento, tuve un sueño.

En el sueño, cuando abrí los ojos, descubrí que el niño no estaba en la cama, su pequeña manta estaba envuelta en el alféizar de la ventana.

Me arrastré y lo vi acostado en el jardín de flores...

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