Capítulo 10 DESPEDIDA

No podía dejar de pensar en él. Dante.

Desde que me dijo que debía marcharse a una misión, la ansiedad me corroía por dentro. Una parte de mí quería huir, olvidarlo, fingir que nunca había pasado nada… pero la otra, la más fuerte, me gritaba que lo buscara, que no dejara que se fuera sin despedirnos...

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