Jaque mate

—Madre.

Su voz es sonora, retumbando desde lo profundo de su vientre con una suavidad arrolladora que hace que mi cuerpo clame por él, deseando que me penetre. Mi ser se inclina automáticamente en su dirección, mis pechos se alzan con anticipación mientras me incorporo lentamente, gimiendo por el d...

Inicia sesión y continúa leyendo