Capítulo 127

Noah

Los ojos grises de Aiden, normalmente fríos y afilados, estaban inyectados de rojo, pesados con algo que parecía ser tristeza. —Nunca he sido bueno para decir no a la tentación. Igual que con este whisky, no debería haber bebido. Una botella cara que he guardado durante años como símbolo d...

Inicia sesión y continúa leyendo