Capítulo 81 Viva la amistad

A la mañana siguiente, Victoria se despertó sobresaltada por el sonido de disparos fuera de la ventana.

Asustada, se sentó rápidamente y gritó—¡Señor Cross!

Pero su lugar ya estaba vacío, dejando solo un calor persistente.

Al incorporarse, notó un conjunto de ropa de mujer, cuidadosamente doblado...

Inicia sesión y continúa leyendo