Capítulo 11 La confesión repentina

Hazel finalmente lo dijo todo.

George, aún luciendo completamente imperturbable, se recostaba en el sofá de la sala, con las piernas cruzadas como si fuera el dueño del lugar.

Hazel se sintió un poco incómoda, '¿No es esta mi sala?'

George, todavía en el sofá, finalmente habló —Pensé que la señor...

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