Capítulo 34 Solo un juego para adultos

La voz de George tenía un tono definitivo. Hazel asintió, y George la levantó, colocándola suavemente en la cama como si fuera algo precioso.

Sus acciones y tono eran como la noche y el día.

—George —llamó Hazel, usando su nombre por primera vez.

—¿Sí? —respondió George.

—Estoy cansada —dijo Haz...

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