Siempre has sido mía, Savannah

Capítulo 47: Siempre Has Sido Mía, Savannah

El aire de la noche era fresco, cortante y olía tenuemente a lluvia mientras me alejaba del caos de la cena de ensayo.

Las risas y el tintineo de copas se desvanecieron, reemplazados por el silencio de los jardines y el lento latido de mi pulso en mis pr...

Inicia sesión y continúa leyendo