Capítulo 22 ¿De verdad me vas a matar?

Al escuchar estas palabras, la mente de Daniel se quedó en blanco. Sentía como si hubiera caído en un horno ardiente, y todo su cuerpo estaba cubierto de sudor frío, con los poros dilatados.

—Papá, tú... ¿Estás bromeando conmigo?

No podía creerlo.

¡Esto es verdad!

La alta dirección de estos banc...

Inicia sesión y continúa leyendo