Silencio

Me senté al borde de mi cama, sosteniendo mi teléfono en la mano, contemplando llamarlo primero. Nunca quise dejarlo, no de esta manera, solo quería ver cómo sería mi vida si mi padre no estuviera en ella. Qué se sentía no temer cada minuto de estar en esa casa. Pero me dio algo de claridad, supongo...

Inicia sesión y continúa leyendo